Ay...sí, si, sí...
amigos...! ...cuando lo pienso... cuantos recuerdos..., mi padre humano
me llevaba con él, todos los días... raro para un gato, pero como en
verdad él me encontró dentro de una caja, en la calle, la misma que
recorría día a día buscando su sustento, los recorridos juntos, los
hicimos desde siempre, cuando nos conocimos yo era re chiquitito, y fui
creciendo con sus charlas y sus locuras tan divertidas, a él le gustaba
cantar y bailar y se reía del mundo y le hablaba al sol... cuando
salíamos a trabajar, yo ya me habia acostumbrado, me sentaba sobre la
bolsa, vacía primero e iba dando un saltito y otro y otro a medida que
la pila de cajas y cartones crecía, siempre quedaba sentado arriba de
todo, como un gran trono de cartón... ja! que buenos recuerdos...!!!
sí,
sí... entiendo, muchos de los que lean, pensarán que no era vida para
un gato, y la verdad es que ahora visto desde la distancia... no, no era
vida para un gato, en realidad tampoco es muy vida para un humano, pero
eso me había tocado en suerte y el cariño de mi humano bastaba y
sobraba para reemplazar las carencias de otro tipo, como una buena casa ó
una gran comida..., más allá de eso... debo decirles también que hasta
era divertido ir razguñanado todas esas cajas, y ver los autos pasar y
las luces de la ciudad, que se iban prendiendo y dejaban ver un paisaje
como un arbolito de navidad eterno y alegre...
Tambien es cierto
y lamentablemente ese fue el inicio del fin, que mi humano a veces
fumaba y otras tomaba cosas raras, que luego lo ponían raro, distinto, a
veces más agresivo, a veces como un zombie que dormía días enteros... y
más de una vez en ese estado me zampó algun golpe... no me gusta
decirlo, pero bue... es así... aunque muchas más, eran las veces que me
hacía cariños y muchas otras cuando no hubo ni un centavo dejó de comer
él para que en mi plato no faltara nada... así que con el tiempo, fui
aprendiendo a esquivarlo cuando estaba mal y buscar su compañia cuando
estaba bien, y disfrutarlo, porque mi humano era divertido y me
hacía carIños y jugaba conmigo, me daba rico de comer... y así prefiero
recordarlo...
Fue aquella noche sofocante en medio del verano que
tomó algo que pareció más raro que de costumbre..., no sé qué, pero se
puso mal, muy mal y como teníamos que salir ó salir porque ya no había
ni un centavo en casa, allí fuimos, hasta nuestro lugar predilecto,
Plaza Italia, juntábamos una caja aquí, otra allá, el kiosquero amigo
había guardado una pila enooooorme por los días que no fuimos, mi trono
de cartón crecía y crecía y yo disfrutaba alto muy alto... cuando de
repente... cual no sería mi sorpresa, mi humano comenzó a bailar y
cantar fuerte y reir... pero en el medio de la calle...!!!! golpeaba los
costados de los colectivos y hacía pasitos de baile entre los autos...
Plaza
Italia, imaginen... Plaza Italia, lugar conocido, pero tan, tan
transitado, los coches lo esquivaban para un lado y para el otro y él...
bailaba, reía, saltaba... hasta que... un colectivo no logró frenar a
tiempo... dejó de reír... dejó de cantar... y se quedó muy quieto... yo
lo miraba desde a bolsa, precoupado un montón de gente se amontonó a su
alrededor...
Cuando vino la ambulancia lo cargó en una camilla y
...raro... lo taparon todo como si tuviera frío... ó eso quise pensar,
en realidad en ese momento ya sabía que él no volvería... pensé correr
detras de la ambulacncia pero el tránsito era demasiado y me dió mucho
miedo así que ahí quedé...
Sentado, pensando, pensando que hacer de mi vida
Hacia la
noche tarde otros cartoneros se habían llevado primero los cartones, y
luego la bolsa, nadie en cambio me llevó a mi... cada vez quedaba menos
de mi humano, sólo el recuero muy dentro mío...
cuando me debatía en
esos pensares, pasó una señora, me vió, se me acercó... preguntó a los
vecinos si yo era de "alguien" y "alguien" le contó la historia...
A esta altura yo seguía sin comer, mi panza hacía muchos ruidos, tenía sed y un poco bastante de miedo
.- hola gatín, bonito... tenés amigos a quienes llamar...??? -dijo en un casi perfecto idioma felinus-
.- no... nunca tuvimos amigos...mi humano era muy solitario y yo... con él...
.-
queres venirte conmigo? podemos ir a un lugar donde, aunque llueva, en
las paredes siempre brilla el sol, la comida es buena y lo mejor es que
hay mimos para todos, y llegan muchos visitantes dispuestos a ofrecer
amor con casa incluída por todos los 20 años de un gatín...
Eso
que me ofrecía, se parecía mucho a un hogar... y sí, era un Hogar
de tránsito... un hogar sustituto a donde muy triste pero resignado...
allí un grupo de gatos, gatitos y gatones me recibieron, me dieron
ánimo, me acompañaron a conocer las dependencias... hay patios, pulmones
verdes llenos de árboles, terrazas con plantas llenas de flores, techos
donde esconderse para preocupar un ratito a Sandra cuando no nos
encuentra, lugares de sol, de sombra, platos de comida por todos lados,
ups....! saben? también tenemos baños!!!!!! cuadrados y llenos de
piedritas!!!! como los gatos de las películas...!!!
....y
lo mas importante de todo??? tenemos amor, aquí me contuvieron de mi
tristeza, me permitieron soñar que otra vida es posible, y aunque en la
foto sigo rascando cartones porque me encanta, hoy puedo darme el lujo
de tener esperando al lado del cartón un sobrecito blando con muchas
vitaminas para terminar de crecer fuerte y lindo...!!!
No
sé bien que más contar de ésta, mi nueva vida... sólo que pasado ya un
tiempito de aquella triste tarde de verano, creo estar más que listo
para una nueva familia...
Conocen
a alguna?!?!?!?!!! yo pienso en
una, sólo una a quien amar por todas mis 6 vidas restantes.
Si se animan, los espero en el Hogar!
Kilaj,,,,, si si, hasta tengo mi propio nombre Lourdesiano!
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